Se acabó. It´s over

Malas noticias, Bandini, malas. Voy a tener que colgar la cesta definitivamente. Sí, se acabó.
Llevaba varias semanas ensayando una vez por semana con mi amigo Perico del que te he hablado en alguna otra ocasión.
Empezamos con cautela. ¿Cómo responderá el brazo? ¿Y las rodillas? ¿Regresará aquella ciática de hace diez años que me dejó descojonado un par de semanas?
Lleno de dudas, pero animado por Perico que tiene más afición al jai-alai que los dos hermanos Mendi juntos, la cosa es que nos arrimamos al Atano III, un frontón de 36 metros, ideal para jugar a pies parados. Continue reading

¿Por qué Hemingway no escribió: «Jai-alai, Fiesta alegre»?

Mi querido Bandini. Acabo de terminar de leer uno de tus relatos: `Los pecados de la madre´ y te juro que he disfrutado tanto como cuando veía jugar en Barcelona a Egurbide, Ondarrés y a Chimela juntos. Qué retrato psicológico, qué maestría a la hora de reflejar las interioridades de las familias ítalo-americanas. Con las dos últimas páginas me han saltado las lágrimas como cuando Ondarrés entraba a bote-pronto y Chimela soltaba un bajonazo, un tiralíneas a dos metros del fleje inferior, y la pelota mordía la chula y besaba el piso para morir poco después. Continue reading